Tuesday, January 17, 2006

ESTE CONGRESO NO DEBE APROBAR EL TLC

ESTE CONGRESO NO DEBE APROBAR EL TLC

Alejandro Toledo y Alfredo Ferrero insisten, erre con erre, en que el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos sea aprobado por el Congreso peruano en los meses que viene. Pero no tienen una sola razón que les de sustento.

¿Hay alguna ventaja por firmar TLC antes? No, porque el ATDPEA que ya permite el ingreso de nuestros productos al mercado norteamericano con impuestos rebajados, está vigente hasta diciembre.

¿Estamos los peruanos en condiciones de poder decidir si el TLC nos conviene o no? No, porque el gobierno todavía no publica el texto completo, ocultando una sección crítica: la del agro.

¿Este Congreso está informado y ha discutido sobre el TLC? No, Alfredo Ferrero durante dos años no ha querido ir una sola vez al pleno del Congreso a informar y debatir sobre el TLC. Ha invitado a decenas de congresistas, con la plata de los contribuyentes, a lujosos viajes para ganarse sus simpatías. Pero de ahí a creer que esos congresistas, de quienes no hemos oido una sola palabra sobre el TLC, están informados del tema, hay una larga distancia. Hay muy pocos congresistas que realmente han estudiado el tema, como Elvira de la Puente o Javier Diez Canseco, y ellos cuando han viajado lo han hecho con la suya.

¿Debe un gobierno y congreso deslegitimados, tomar decisiones que no son urgentes y que comprometerán al Perú por 50 años o más cuando estamos a unas semanas de elegir un nuevo gobierno? No, un criterio democrático elemental indica que debe oirse la voz del pueblo expresada en las urnas.

Pero esa es la verdadera razón por la que Toledo y Ferrero quieren que el TLC se firme ya: el miedo a las elecciones. Porque de los principales candidatos en pugna, solamente Lourdes Flores se ha manifestado a favor de firmar este mal TLC ahora. La mayoría piensa votar por otros candidatos, y los grandes intereses detrás del TLC se mueren de miedo. Pero esa no es una razón válida cuando el objetivo es el desarrollo nacional.

MAL TLC: REVELACIÓN Y MISTERIOS

MAL TLC: REVELACIÓN Y MISTERIOS

Revelación: Nuestra biodiversidad y conocimiento tradicional han sido entregados. De firmarse este TLC con los Estados Unidos, el Perú se compromete a aceptar que se patenten plantas, sin poder exigir condiciones especiales por tratarse de especies originarias de nuestro territorio. Por otro lado, el Tratado no establece ninguna obligación de que esas patentes deban otorgar beneficios al Perú o a los pueblos indígenas cuyos conocimientos han servicio de base para la patente. Respecto al tema de la biodiversidad, solo hay una carta, lateral al Tratado, en la que los Estados Unidos solo reconocen el tema pero no se comprometen a nada, absolutamente a nada.

Así, de firmarse este TLC las plantas medicinales propias de nuestro territorio, que los peruanos han aprendido a explotar desde cientos de años de atrás, podrían ser patentadas con alguna pequeña modificación genética y las ganancias serían exclusivamente para las empresas trasnacionales. Incluso los peruanos tendremos que pagar precios elevados por esas plantas, debido a las patentes.

Esto fue materia de debate público meses atrás, y Pablo de la Flor – viceministro y jefe del equipo negociador- aseveró públicamente que este TLC defendía el patrimonio que el Perú tiene en biodiversidad y conocimientos tradicionales. Hoy, está claro que nada de eso era verdad.

No se trata, por cierto, de un tema menor. La biodiversidad es una de las pocas áreas en las cuáles el Perú tiene una gran riqueza. El conocimiento es considerado como la base del desarrollo mundial desde hace una década, y su aprovechamiento económico define la diferencia entre ser un país desarrollado o seguir siendo una país pobre. Tenemos una gran riqueza a la que este gobierno, como todos los anteriores, ha dado la espalda, y esa riqueza se regalaría con este mal TLC.

Misterio: ¿Porqué los párrafos que se refieren a la posibilidad de levantar las patentes por necesidad de salud pública no son parte del tratado, sino de una carta lateral? ¿Porqué no dicen explícitamente que la protección de datos de prueba puede también ser exceptuada en estos casos? ¿Porqué el texto limita esto a casos de emergencia y no incluye otras necesidades de salud pública, como sí lo hace la Declaración de Doha de la Organización Mundial del Comercio?

Misterio: ¿Por qué no han publicado la sección del Tratado referida al agro? ¿Cómo es que seis semanas son suficientes para tener el texto preliminar en todo lo demás, menos en este tema que es el más sensible de todos? ¿Qué se está ocultando?

Ya sabíamos que de firmarse este TLC con los Estados Unidos se afectaría profundamente a la agricultura, permitiendo importaciones subsidiadas que representan competencia desleal y empobrecen al campesinado. Ya sabíamos que los genéricos demorarían más en poder entrar a competir y las medicinas subirían de precio. Ya sabíamos que con este TLC, las empresas mineras que contaminan el medio ambiente y evaden impuestos tendrían la protección de tribunales internacionales. Todo eso ya lo sabíamos.

Ahora sabemos además que el equipo negociador mintió cuando habló de defender nuestra riqueza biogenética, y que más de un mes después de cerradas las negociaciones, siguen ocultando información sobre la agricultura. En esas condiciones, Ferrero y Toledo insisten en que este pésimo Congreso, ignorante del tema, apruebe el TLC. Qué desparpajo.

Pedro Francke

KOURI Y EL PEAJE DE LA AV. FAUCETT

KOURI Y EL PEAJE DE LA AV. FAUCETT

Los peajes cuestan entre 1,3 y 1,5 centavos de dólar por kilómetro asfaltado. Así, por los dos kilómetros ida y vuelta en la Av. Faucett en el Callao deberíamos estar pagando 6 centavos de dólar, a lo más 20 céntimos de sol. Pero el peaje que se cobra es de 1 sol cincuenta, 7 veces más. Estos son los cálculos revelados por el Decano del Colegio de Ingenieros de Lima, Ing. Javier Piqué, recogiendo estudios de expertos ingenieros. En palabras del Ing. Piqué, “es un abuso”.

Este “abuso” es producto de una concesión otorgada por el municipio del Callao dirigido por Alex Kouri. El mismo municipio ha hecho que las vías laterales sean ahora mucho más lentas, poniendo en ellas más de media docena de rompemuelles y semáforos adicionales. De tal manera que ahora, o pagamos el sol cincuenta, o vamos mucho más lento que antes gracias al municipio chalaco.

Estos arreglos de la Av. Faucett han sido tan mal concebidos, que los puentes peatonales no cubren toda la vía, sino que absurdamente dejan de lado los laterales. De tal manera que los peatones tienen que cruzar a nivel, con el riesgo correspondiente, una parte de la vía, y luego de eso recién pasar por encima de los demás carriles. El alcalde del Callao, Alex Kouri, bien podría haberse paseado por la vía de evitamiento o cualquier otra vía rápida de Lima para ver cómo se hacen puentes peatonales que brinden realmente seguridad a los peatones. Pero sólo con esos puentes peatonales mal hechos se puede justificar los rompemuelles adicionales que obligan a los carros a ir más lento, empujándonos a ir por la vía en la que se cobra peaje.

El Colegio de Ingenieros de Lima ha anunciado que interpondrá una queja ante la Defensoría del Pueblo en relación a estos peajes que considera abusivos. Esperamos que tal queja sea escuchada. Si las concesiones de pistas y carreteras empiezan a asociarse con el abuso, una forma interesante de participación del capital privado en la construcción de infraestructura se verá desacreditada.

Pedro Francke

CANDIDATOS: EN SALUD ES MEJOR ACTUAR ANTES

CANDIDATOS: EN SALUD ES MEJOR ACTUAR ANTES

Empiezan a presentarse las propuestas de salud de los principales candidatos y la atención se centra, una vez más, en la necesidad de curar a los enfermos. Esto es fundamental, ya que entre 20% y 25% de los peruanos no tiene atención de salud cuando lo necesita. El drama que este mismo día están pasando miles de familias pobres porque uno de sus miembros ha tenido un accidente o enfermedad grave y se requieren miles de soles para la operación requerida, es terrible. Las medicinas que ya son caras, subirían más de precio si se llegara a aprobar el TLC.

Sin embargo, sabemos de la experiencia internacional que la manera más eficaz para mejorar la salud de un pueblo no es la atención de la enfermedad sino la acción sobre los factores sociales y ambientales que dañan nuestra salud. Al respeto, hay varios factores críticos en el Perú. La carencia de agua potable y desagüe es el primero, ya que por este medio se propagan muchas enfermedades contagiosas. Todavía 30% de los hogares peruanos, sobretodo en las zonas rurales, no tiene agua potable, y esa es una necesidad urgente a atender.

Un segundo tema clave es la nutrición. Uno de cada cuatro niños es desnutrido crónico. En parte ello se debe a la pobreza y a las enfermedades diarreicas facilitadas por la falta de agua potable. Pero sólo en parte: inadecuados hábitos de alimentación y cuidado de los niños pequeños son una causa muy importante de la desnutrición, y el estado hace muy poco para que los hogares peruanos tengan acceso a alimentos ricos en proteinas, hierro y otros micronutrientes. Nuestra pesca sigue más destinada a exportar harina que a proveer a los peruanos de un alimento sano y nutritivo. Muchos programas alimentarios están mal enfocados: no llegan a quienes más lo necesitan, reparten alimentos inadecuados y no realizan actividades fundamentales de capacitación y organización comunitaria. Necesitamos ¡YA! una estrategia nutricional integral.

Una tercera área crítica es la del medio ambiente. El aire que respiramos en Lima es insalubre. En La Oroya, los niños están siendo envenenados con plomo de una manera gravísima, y la empresa Doe Run quiere postergan por 4 años las inversiones a la que está obligada para controlar la contaminación del aire: sus ganancias les resulatn más importantes que la salud y la educación de miles de niños. Hay ríos y lagos, de los que luego sale el agua que se toma, están contaminados con metales pesados. La contaminación ambiental debe ser frenada.

En estas áreas, como en muchas otras, la educación es fundamental. Los colegios no están enseñando a nuestros niños como cuidar su salud. El resultado más visible de ello es la pésima dentadura de la mayoría de la población, producto sobretodo de mala higiene bucal, pero son muchas las maneras como por ignorancia, terminamos dañándonos a nosotros mismos, incluyendo el cigarro, las drogas y la obesidad producto de mala alimentación y poco ejercicio. La educación peruana debe otorgar a la salud la importancia que merece.

Los candidatos deberían aprovechar la campaña para presentar sus propuestas para la promoción de la salud. Recuerden que más vale prevenir antes que lamentar. Los mejores planes de gobierno en salud serán los que tomen muy en consideración esta cuestión fundamental.

25% de niños desnutridos

25% de niños desnutridos

El 25 por ciento, es decir uno de cada cuatro niños peruanos menores de 5 años sufre de desnutrición crónica. Esto quiere decir que, debido a mala alimentación y episodios recurrentes de enfermedad, no han crecido como deberían. El problema mayor es que esa deficiencia de crecimiento no es sólo física sino también emocional y mental. Si a ello sumamos la anemia que afecta a más de la mitad de niños pequeños, la que tambipén afecta su capadidad de aprendizaje, el cuadro es desolador.

¿Qué hace la sociedad y el estado peruano por evitar esa tragedia nacional? Muy poco. Se destinan apenas 500 millones de soles anuales a programas alimentarios como el vaso de leche o los comedores populares, que además en su mayoría no están orientados a evitar la desnutrición infantil sino a aliviar la pobreza. Y aunque parezca sorprendente, no es lo mismo. La desnutrición no se debe solamente a la falta de ingresos o de alimentos en el hogar: dos de cada tres niños en pobreza extrema no están desnutridos, y también en hogares no pobres hay niños desnutridos.

La desnutrición infantil tiene mucho que ver con la falta de conocimientos de las madres sobre como cuidar y alimentar mejor a sus hijos, con la carencia de agua potable y desagüe que produce enfermedades diarreicas recurrentes, y con deficiencias en la atención de salud.

El próximo gobierno debería tener como una de sus primeras prioridades, el combate a la desnutrición infantil. Para ello, es indispensable afirmar claramente una estrategia integral, que incluya un suplemento alimenticio - con los contenidos nutricionales necesarios- a las familias que lo requieren, pero que ponga mucho énfasis en educar a las madres y padres, en mejorar los servicios de salud y en dotar de agua potable y saneamiento a quienes carecen de ellos. Las organizaciones del vaso de leche y los comedores populares deben ser apoyadas para que puedan cumplir un rol clave en esta tarea, incluyendo el dar alimentos adecuados a quienes de verdad lo necesitan y el servir de espacios de capacitación de las madres.




POR UN BUEN AUMENTO DEL SALARIO MÍNIMO

POR UN BUEN AUMENTO DEL SALARIO MÍNIMO

Nuevamente se debate en el Perú el tema del salario mínimo. Hasta el momento, no hemos oído a nadie que considere que sean suficientes para vivir los 500 soles, que no representan ningún aumento real. Sin duda, ninguno de los críticos de aumentar el salario mínimo ha vivido nunca con esta cantidad mensual.

El debate central, sin embargo, se centra en los potenciales efectos de aumentar el salario mínimo sobre el empleo. Los críticos del aumento del salario mínimo han afirmado que podría llevar a una pérdida de empleos, dado que supuestamente las empresas estarían menos interesadas en contratar trabajadores si tienen que pagarles más. Varios estudios recientes muestran que ese efecto no existe o no es relevante.

Pero no hay que perder de vista el efecto macroeconómico. Porque si bien los salarios constituyen un costo para la empresa que los paga, por otro lado son también los ingresos con los cuales las familias van al mercado a comprar sus alimentos, su ropa y demás. De tal manera que el aumento del salario mínimo haría que las empresas enfrenten una mayor demanda, lo que les permitirá aumentar su producción y, debido a ello, requerirán más trabajadores. Esta mayor demanda, a su vez, permite que las pequeñas y medianas empresas nacionales, avancen hacia nuevas tecnologías de mayor escala y aumente la productividad.

Lamentablemente, el salario mínimo sólo afecta a las empresas formales, e incluso dentro de ellas a una pequeña parte de los trabajadores, porque la mayoría gana más que el mínimo. Por ejemplo, el aumento del salario mínimo a 500 soles afectaría a 360 mil trabajadores a nivel nacional, menos del 4% del total. Por ello, el aumento del salario mínimo debería ser parte de una política laboral dirigida a aumentar los salarios en general, para lo cual debería ir junto con asegurar derechos básicos de sindicalización y negociación colectiva a los trabajadores. No debemos mantener los salarios en el bajísimo nivel en que se encuentran desde el shock fujimorista.

Evidentemente, el crecimiento económico no depende solamente de la demanda de los trabajadores, y es necesario preservar el equilibrio macroeconómico, ya que de lo contrario podemos caer en déficits externos o elevadas inflaciones que no le hacen bien a nadie. Pero en las condiciones actuales de la economía peruana, con un gran superávit en las cuentas externas, un aumento moderado de la demanda interna aceleraría el crecimiento económico sin riesgo.

Hay, desde luego, también un efecto social. Quien gana un salario mínimo está entre los pobres del Perú. Introducir mediante el aumento del mínimo un elemento de justicia social, en un país fragmentado y con alta conflictividad social, donde las diferencias entre los ingresos de los dueños de las empresas y sus trabajadores son abismales, es también importante.

La discusión del salario mínimo debe tomar en cuenta el conjunto de efectos que un posible aumento tendría. Y debe considerar también cómo la sociedad peruana va encontrando su equilibrio – económico y social – y su rumbo hacia el futuro. Este análisis más comprehensivo indica que un aumento significativo del salario mínimo sería positivo para el país. Estén de acuerdo o no, ojalá los candidatos se manifiesten sobre este tema y presenten sus propuestas sobre como mejorar los salarios en los próximos 5 años.
Pedro Francke

DOE RUN VS. LA SALUD PUBLICA

DOE RUN VS. LA SALUD PUBLICA

La empresa norteamericana Doe Run compró la refinaría de La Oroya durante la década pasada, comprometiéndose a realizar inversiones para controlar las emisiones de contaminantes que envenenan el aire de la zona. Hoy, casi una década después, Doe Run quiere que durante 5 años más le permitan seguir contaminando con metales que provocan graves problemas de salud a la población.

No se trata de un problema ligero. Un estudio supervisado por la Universidad de St. Louis, Missouri, ha encontrado que en La Oroya los niños tienen mucho más plomo en la sangre que los estándares internacionales máximos, lo que causa diversos problemas de salud y en particular limita el desarrollo mental. 9% de los niños tienen tanto plomo en la sangre que necesitan atención médica urgente, pero 97% exceden los “niveles de preocupación” internacionales. 90% de las madres gestantes en La Oroya tienen niveles de plomo que compremeten el desarrollo del feto. No es por nada: la empresa emite mil toneladas al año de plomo al ambiente. El estudio también encontró niveles elevados de antimonio y cadmio, metales que producen cáncer, defectos genéticos e insuficiencias renales. El exceso de estos metales pesados se extiende hasta Concepción, a 100 kilómetros de distancia.

La empresa Doe Run quiere renegar de los compromisos que asumió cuando compró la refinería. La razón: se trata de costosas inversiones por decenas de millones de dólares. Pero ese costo lo conocían perfectamente cuando compraron la refinería. Además, en los últimos años los extraordinarios precios internacionales de los metales les han permitido ganancias excepcionales.

Permitir que Doe Run se salga con la suya no solamente es inaceptable desde el punto de vista de la salud pública. Para futuras privatizaciones, también sería una clara señal de que los competidores puede ofrecer cualquier cosa sin que luego tengan que cumplir su palabra, viciando todo el proceso. Además, reafirmaría ante la opinión pública la mala imagen de una minería contaminante que no repara en nada con tal de obtener las mayores ganancias. No debemos permitirlo.

ECONOMIA PERUANA: AL CÉSAR LO QUE ES DEL CÉSAR

ECONOMIA PERUANA: AL CÉSAR LO QUE ES DEL CÉSAR

Los indicadores macroeconómicos nacionales andan bien. Pero las cosas se pueden ver de distinta manera si nos comparamos con el resto de países en desarrollo. Esta comparación, además, nos permite dilucidar si los resultados de los últimos años son producto de buenas políticas o si son producto de buenas condiciones internacionales. Si se tratara de buenas políticas, el Perú debería estar mejor que el resto. En cambio, si el resultado se ha logrado sólo porque las condiciones internacionales son buenas, los indicadores macroeconómicos serán positivos pero no mejores que los de los demás países.

El indicador preferido de los economistas es el crecimiento del PBI, que nos dice cuánto producimos en total. En los últimos 4 años (2001-2005), el PBI del Perú ha crecido 4,9% anual en promedio, sin duda una cifra positiva. Pero el promedio de los países emergentes y en desarrollo (cifras FMI) es de 6,2%, bastante por encima del Perú. Conclusión: son las condiciones internacionales las que han impulsado la economía peruana hacia delante, y la política económica no ha sido mejor que la del resto de países en desarrollo. Pedro Pablo Kuczynski no tiene de qué ufanarse.

El segundo indicador macroeconómico fundamental es la inflación; quienes hemos vivido la traumática experiencia de la hiperinflación sabemos lo importante que es tener precios estables. En los últimos cuatro años, la inflación en el Perú ha sido de apenas 2.0 % en promedio, mientras que el promedio de los países en desarrollo es de 5.9%. Hasta la economía estadounidense ha tenido una inflación más alta que la peruana, con un promedio de 2.4%. La inflación peruana en los últimos años ha sido una de las más bajas del mundo y de nuestra historia. Aplausos para el directorio del Banco Central de Reserva, cuya función según la Constitución es precisamente esa: mantener los precios estables.

Las tasas de interés, otra variable macroeconómica fundamental, son resultado conjunto de dos instituciones. Por un lado, la política monetaria del BCR hace que haya más o menos dinero y crédito en la economía, y con esa regulación de la oferta hace que las tasas de interés bajen o suban. Por el otro, la Superintendencia de Banca y Seguros promueve (o no) la competencia y defiende (o no) los intereses del público, haciendo que el margen de ganancia de los bancos se amplíe o reduzca. Entre el 2000 y el 2005, esa diferencia entre lo que los bancos pagan a los ahorristas y lo que cobran por sus préstamos en soles, también llamado spread, ha aumentado de 17% a 23% anual, por lo que las ganancias de los bancos logran niveles récord. Es evidente que la Superintendencia de Banca no ha estado haciendo un buen trabajo. Al mismo tiempo, gracias a la política del BCR, un préstamo a un año plazo que en el 2000 costaba 26,5% hoy cuesta casi la mitad: 14%.

Un balance económico del quinquenio debe ubicar adecuadamente méritos y deméritos, y compararnos con el mundo es esencial para el ello. El crecimiento económico ha sido menor que el del promedio de los países en desarrollo, de donde se deduce que este crecimiento se debe al contexto internacional y no a la política neoliberal de PPK, que además ha concentrado los beneficios en unos pocos. El BCR que preside Oscar Dancourt sí ha logrado una inflación menor que los demás países, en beneficio de todos los peruanos.

BANCOS: OLIGOPOLIO CON GANANCIAS EXTRAORDINARIAS

BANCOS: OLIGOPOLIO CON GANANCIAS EXTRAORDINARIAS

En el 2005 los bancos tendrán utilidades por 400 millones de dólares, un 80% más que el año pasado. Los dueños de los bancos obtienen una rentabilidad superior al 20% anual por su capital, bastante por encima de lo que internacionalmente se considera una tasa de ganancia razonable y cerca del doble de lo que ganan los industriales y comerciantes.

El negocio de los bancos es, en esencia, conseguir ahorros y luego prestar esos fondos a tasas más elevadas. Los bancos han obtenido este año ganancias muy grandes porque han incrementado el llamado “spread”, que es la diferencia entre la tasa de interés que nos pagan a los ahorristas y aquella que cobran por los préstamos que otorgan. Esta diferencia es impresionante: los bancos nos pagan menos de 3% por nuestros ahorros en soles pero cobran en promedio 25% por los préstamos que otorgan ¡8 veces más!.

Esta enorme diferencia ha ido aumentando en vez de disminuir, a pesar de que los bancos han tenido dos ventajas durante el año. Por un lado, el porcentaje de gente que no paga a tiempo sus préstamos se ha reducido, pasando de más de 10% de los créditos en el 2001 a menos del 3% este año, la cifra más baja en dos décadas. Los bancos cada vez tienen menos problemas de créditos no recuperados, pero no nos pagan más por nuestros ahorros.

Por otro lado, la baja inflación y el crecimiento económico han permitido a la banca aumentar sus créditos. Para la banca, prestar dinero equivale a lo que para otros negocios es vender; y mientras más ventas, más negocio. En el último año la banca ha aumentado sus créditos en más de 5 mil millones de soles. Con más ventas, el peso de sus gastos administrativos se reduce, con lo cual podrían mejorar las condiciones económicas (tasas de interés) que otorgan a sus clientes. Pero ello no ha sucedido.

¿Por qué la banca no ha mejorado el trato económico a sus clientes? La primera razón parece ser la alta concentración en el sistema bancario: apenas cuatro bancos concentran el 80% de los créditos, lo que les otorga un gran poder en el mercado (y también un fuerte poder político). La otra razón es que la Superintendencia de Banca y Seguros ha hecho muy poco por defender a los consumidores, de tal manera que los bancos siguen cobrando comisiones y cargos de todo tipo sin una adecuada información a los usuarios. Así, la competencia entre los bancos por ganarse a los clientes se basa más en propaganda que en ofrecernos mejores tasas de interés.

Que los bancos ganen, no está mal. Pero cuando obtienen ganancias extraordinarias, lo hacen a costa de todos los demás. Por un lado, afectando a los ahorristas, que recibimos tasas muy bajas por nuestro dinero. Por otro lado, aumentando la carga sobre las familias que sacan un crédito hipotecario o de consumo y sobre las empresas que requieren dinero para mover su negocio. El efecto económico es que, con tasas de interés más altas para las empresas, la inversión y el crecimiento económico se reducen. Tener un sistema bancario oligopólico no sólo nos afecta como usuarios individuales, sino también frena el desarrollo.

¿Queremos seguir con una banca que cobra una tasa de interés 8 veces mayor por los créditos que lo que nos paga a los ahorristas? ¿Seguiremos otros 5 años con un superintendente de banca que piensa más en los banqueros que en el país?¿Los candidatos tienen algo que decir al respecto?
Pedro Francke